La organización en planta viene determinada por un estudio riguroso del soleamiento de cada bloque en relación con los demás y por unas condiciones de VPO pasante, que apuesta por una tipología mayoritaria de tres habitaciones, en las que el cuerpo de habitaciones queda localizado en los frentes convexos (de orientación noroeste) y el de cocina y salón en los frentes cóncavos (de orientación sureste). Las tipologías son completamente exteriores, con ventilación a dos frentes y soleamientos compensados “mañana-tarde” asegurando un comportamiento bioclimático óptimo.
El edificio apuesta por una imagen que diferencia y articula los frentes de fachada con el objeto de rematar al conjunto residencial existente. Su volumetría traduce las operaciones de planta y aquellas destinadas a favorecer su soleamiento y por tanto su eficiencia energética y sostenibilidad. La orientación de los bloques permite diferenciar los frentes soleados (según la exposición que presentan y según la localización de las piezas vivideras) de los frentes mas castigados por la orientación, lo cual posibilita un tratamiento diferenciado de sus fachadas que, a nivel urbano, remata la composición del resto de edificaciones.