El solar se sitúa en una posición fronteriza cuya principal característica es la existencia de una línea ferroviaria (con previsión de soterrarse en un futuro) que linda por su frente oeste y una topografía acusada con caída hacia la citada línea. El resto de edificaciones colindantes son de tipo industrial y residencial. El entorno potencia vistas hacia el sur-este, y admite un buen soleamiento sur-oeste, adquiriendo, por su posición dentro de la estructura urbana, un fuerte protagonismo visual.
La propuesta saca ventaja de tales condiciones. Plantea, una estructura volumétrica compacta, en la que se maximizan los frentes con vistas y con buen soleamiento, sin olvidarse de la disposición de elementos bioclimáticos y de tratamiento acústico adecuados. Apuesta por el aumento de densidad, que supone un ahorro en la ocupación del territorio y, como consecuencia, un entorno más sostenible. Una buena solución frente al consumo de recursos.
La edificación, en definitiva, encaja en la ordenación dada ampliando su oferta y sus posibilidades al ofrecer una estructura autónoma pero flexible, que responde a diferentes escenarios, el presente que aprovecha los accesos existentes con una acción de urbanización mínima y el futuro, en el que la trinchera ferroviaria desaparezca, horizontalizando las rasantes del solar y permitiendo un aprovechamiento óptimo del solar y mejorando la accesibilidad del conjunto.