La edificación se entiende como un elemento sostenible de tal forma que sea lo más autosuficiente posible a nivel energético. Para ello parte de una arquitectura contenida y responsable que contribuye a la definición urbana mediante la integración en su entorno adecuándose a las diferentes escalas que el lugar presenta debido a las variadas tipologías edificatorias que coexisten.
Es un edificio compacto que emerge en medio de un parque verde y serpentea en diferentes alturas que tratan de responder a la de sus edificaciones vecinas, sin perjudicar sus vistas y soleamiento. La actuación ayudará a construir la nueva imagen del lugar y a consolidar un espacio público de la mayor calidad para esparcimiento de los habitantes del barrio. Entendemos que intervenir en pequeñas áreas sirve para regenerar la vida de su entorno, al crear nuevos espacios y puntos de encuentro entre las personas.
La propuesta no ajena a su condición de equipamiento, asume la necesidad de liberar espacio público para uso del resto de la ciudadanía. Un intento de caracterizar la propuesta como dotación social, propiedad de la administración y puesta al servicio de los ciudadanos. Esto supone un replanteamiento de su relación con el resto del barrio. Se llega así a una búsqueda de la densidad controlada, apostando por el espacio público.